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Los peligros del cigarrillo se conocen desde hace años. Pero los expertos advierten que respirar el humo del cigarrillo fumado por otra persona (tabaquismo pasivo) también tiene riesgos para la salud.

¿Qué es el tabaquismo pasivo?

El tabaquismo pasivo es una mezcla de lo siguiente:

  • respirar el humo que proviene del extremo encendido de un cigarrillo, cigarro o pipa. Este humo recibe el nombre de "humo de corriente colateral"
  • respirar el humo que el fumador exhala, llamado "humo de corriente principal"

Cuando los no fumadores inhalan estos tipos de humo, pueden tener problemas de salud. De hecho, es casi tan peligroso como ser fumador.

¿Cuáles son los riesgos del tabaquismo pasivo?

Tal vez los fumadores no tengan la intención de poner en peligro a las personas que los rodean, pero lo hacen. El humo del tabaquismo pasivo contiene más de 7000 sustancias químicas, muchas de las cuales pueden provocar cáncer o enfermedad cardíaca.

En los niños, inhalar el humo los fumadores que lo rodean puede provocar lo siguiente:

Es posible que a los niños que están cerca del humo de un fumador también les ocurra lo siguiente:

  • perder más días de clases que los niños que no están rodeados de humo de fumadores
  • tener dificultades para alcanzar un buen rendimiento deportivo o mantenerse físicamente activos

El tabaquismo pasivo también está ligado al síndrome de muerte súbita del lactante.

Con el paso del tiempo, los niños que estuvieron expuestos al tabaquismo pasivo pueden estar en riesgo de:

Además, los niños que crecen en una casa en la que los padres fuman tienen más probabilidades de convertirse en fumadores

¿De qué manera pueden los padres proteger a los niños del tabaquismo pasivo?

En la actualidad, hay menos fumadores que en el pasado. Pero es probable que alguna persona de la familia o algún conocido fume. Para los niños, jamás es saludable inhalar el humo del tabaco. Incluso la exposición breve y ocasional puede afectar al cuerpo.

Las siguientes dos reglas pueden ayudar a proteger a sus hijos (y a usted) del tabaquismo pasivo:

  1. No permita fumar dentro de la casa. Los fumadores deben salir afuera, alejados de otras personas, en especial de mujeres embarazadas y niños. El humo permanece en el aire durante horas después de apagar un cigarrillo. Por lo tanto, si una persona fuma sola en una habitación, otras personas inhalarán el humo.

    Además, el humo se impregna en la ropa, los muebles, los juguetes y las alfombras. Este humo de "corriente terciaria" no se puede eliminar fácilmente con agua y jabón. Los niños que tocan superficies con humo de corriente terciaria absorberán sustancias químicas peligrosas a través de la piel y las inhalarán a los pulmones. Si han fumado, los fumadores se deben lavar las manos y cambiar la ropa antes de alzar o abrazar a un niño.
  2. No permita fumar en un automóvil. Exhalar el humo a través de la ventanilla no reduce prácticamente en nada la exposición al humo.

Nota: el humo de la marihuana contiene las mismas sustancias químicas peligrosas que el humo de los cigarrillos. También contiene tetrahidrocanabinol (THC), el ingrediente responsable del efecto estimulante de la marihuana. El aerosol (vapor) que despiden los cigarrillos electrónicos, con o sin marihuana, también contiene sustancias químicas que pueden ser nocivas. Las reglas de “no fumar” deben incluir la marihuana y todos los dispositivos de vapeo.

Si alguien fuma cerca de su hijo, no dude en pedirle que deje de hacerlo. Pídale amablemente que no lo haga, pero esté preparado para alejarse del fumador si la situación se vuelve incómoda.

Si usted fuma, intente dejar el hábito. Si hay otros fumadores en la familia, ofrézcales apoyo para ayudarlos a abandonar el hábito. Dejar de fumar no es sencillo, porque la nicotina es muy adictiva. Pero hay muchos grupos de apoyo y programas para liberarse del tabaco que pueden ayudar a dejarlo.

Puede encontrar más información y ayuda en línea en:

Revisor médico: Elana Pearl Ben-Joseph, MD
Fecha de revisión: enero de 2024