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Hablar con su hijo sobre el alcohol

Revisor médico: Amy W. Anzilotti, MD

Muchos niños y adolescentes prueban el alcohol durante la enseñanza secundaria, el bachillerato y los primeros años de estudios universitarios, antes de que sea legal hacerlo. Los padres cumplen un papel importante en las elecciones que toman sus hijos relacionadas con el alcohol. Por lo tanto, hable a menudo con su hijo sobre el consumo de alcohol mientras vaya creciendo. 

Una guía para hablar con sus hijos sobre el alcohol en función de la edad. 

Preescolares 

Los preescolares no están preparados para recibir mucha información sobre el alcohol. Pero usted puede darles un buen ejemplo: bebiendo alcohol con responsabilidad (o no bebiéndolo en absoluto), manteniéndose activo físicamente y comiendo de manera saludable. Si su hijo de esta edad le hace preguntas sobre el alcohol, contésteselas con sinceridad y usando palabras sencillas.

De 4 a 7 años

Hablen sobre el consumo de alcohol cuando salga el tema de forma natural. Por ejemplo, si están viendo la tele y ven un anuncio sobre el alcohol, le puede preguntar a su hijo si sabe cómo afecta el alcohol al cuerpo. Explíquele las cosas usando palabras sencillas: Dígale que el alcohol hace que el cuerpo y la mente funcionen más despacio. Después de beber alcohol, puede ser difícil saber cosas como si cubre demasiado en una piscina o si un coche se está acercando demasiado a otro coche. ¡Y el alcohol da mal aliento a las personas que lo beben!

Si su hijo le pregunta por qué los adultos pueden beber alcohol pero los niños no, explíquele que beber alcohol puede perjudicar a un cuerpo que está creciendo y aumentar las probabilidades de que esa persona tenga problemas con la bebida más adelante.

Entre los 8 y los 11 años 

Los niños de esta edad pueden entender cuáles son los efectos del alcohol y por qué son peligrosos para los cuerpos y las mentes que están en proceso de crecimiento. 

Puede hablarle a su hijo sobre los efectos a corto plazo del alcohol, como los siguientes:

  • alteración de vista, el oído y la coordinación 
  • percepciones y emociones distorsionadas
  • facultades mentales alteradas, que pueden conducir accidentes, ahogamientos y otras conductas de riesgo
  • mal aliento
  • resaca

Y de los efectos a largo plazo:

  • daño hepático (en el hígado)
  • pérdida del apetito
  • problemas digestivos
  • daño en el corazón y en el cerebro
  • pérdidas de memoria

Los niños de esta edad quieren encajar en su grupo de amigos. Enseñe a su hijo la importancia de no dejarse llevar y de pensar y actuar como un individuo. 

Entre los 12 y los 17 años

La adolescencia es un buen momento para saber escuchar a su hijo y para mantener abiertas las vías de comunicación con él. Siga siendo un buen ejemplo para él. Aunque parezca que su hijo no escuche lo que usted le dice, los estudios muestran que los padres influyen mucho en el comportamiento de sus hijos.

De a su hijo buenas razones para que no beba alcohol, como estas:

  • Beber siendo joven pueden llevar a tener problemas con el alcohol más adelante.
  • Los adolescentes que beben alcohol es más probable que mantengan relaciones sexuales antes y que las mantengan sin protección.
  • Los adolescentes que beben alcohol tienen más probabilidades de tener problemas en la escuela.
  • Beber alcohol es perjudicial para el rendimiento deportivo.
  • Beber alcohol antes de cumplir 21 años es ilegal. 
  • Beber alcohol puede llevar a tener cambios cerebrales a largo plazo.

Si le da lecciones a un adolescente sobre el consumo de alcohol y usa tácticas para asustarlo sobre los riesgos de este consumo, es posible que él se cierre a hablar del tema. Pero sea claro con su hijo y dígale que usted no quiere que beba alcohol. Si usted tiene problemas relacionados con el alcohol en su familia, asegúrese de que su hijo sabe que eso hace que él sea más proclive a desarrollarlos. 

A los adolescentes les gusta sentirse valorados y aceptados por sus amigos. Ayude a su hijo a preparase para diferentes situaciones a fin de que no lo tomen desprevenido. ¿Qué puede decir en una fiesta cuando le ofrezcan alcohol? ¿Y si alguien que se supone que debería conducir bebe alcohol? Hagan una lluvia de ideas los dos juntos y dígale a su hijo que siempre lo puede llamar o enviar un mensaje de texto para que usted lo pase a recoger, sin regañinas ni castigos.

¿Qué más pueden hacer los padres?

Los padres son modelos de comportamiento, también para los adolescentes. O sea que dé un buen ejemplo a su hijo bebiendo alcohol con responsabilidad (o no bebiendo en absoluto), no use el alcohol para vencer el estrés ni beba alcohol antes de conducir. Si mantiene conversaciones sinceras sobre el alcohol con regularidad con su hijo, lo ayudará a tomar buenas decisiones.

De todos modos, los padres deben estar pendientes de los problemas relacionados con el alcohol y deben fijar unas normas claras. Pídale a su hijo que sea sincero con usted si prueba el alcohol. Si cree que su hijo ha estado bebiendo alcohol pero no se lo cuenta, no lo ignore. Si cree que su hijo tiene un problema grave con el alcohol, pida ayuda al médico de su hijo. 

Otras cosas que puede hacer son: 

  • Saber dónde está su hijo y con quién está. 
  • Saber cómo ponerse en contacto con su hijo. Su hijo debe llevar encima su teléfono móvil y tenerlo conectado, y usted deber tener los números de teléfono de sus amigos o de la casa donde vaya a estar. 
  • Conocer a los padres de los amigos de su hijo y saber cómo ponerse en contacto con ellos. 
  • Si su hijo ya es un niño mayor o un adolescente, hable con él sobre sus valores relacionados con el consumo de alcohol. Sea claro y dígale que usted no quiere que beba alcohol.
  • Diga a su hijo con qué frecuencia quiere que se contacte con usted cuando esté fuera de casa. 
  • Si su hijo es adolescente y conduce, dígale que no puede beber ninguna cantidad de alcohol cuando tenga que conducir. Considere la posibilidad de firmar un contrato con su hijo donde todos los miembros de la familia se comprometan a no beber antes de conducir. Y deje claro que su hijo perderá el privilegio de conducir cuando no cumpla el contrato. 
Revisor médico: Amy W. Anzilotti, MD
Fecha de revisión: septiembre de 2020