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Consejeros escolares

Revisor médico: D'Arcy Lyness, PhD

¿Te sientes agobiado por las tareas escolares? ¿Tienes miedo porque tus padres se están separando? ¿Te preocupas por un amigo? ¿Sientes que no encajas?

Si un problema ocupa tu mente, es posible que te cueste dormir. Tal vez te des cuenta de que no puedes concentrarte para hacer los deberes. Si los problemas se acumulan, incluso podrías llegar a sentirte deprimido.

Todos atravesamos momentos difíciles; pero no tienes por qué enfrentarlos en soledad. Cuando necesites apoyo o consejos, tu consejero escolar puede ser una excelente persona para hablar.

¿Cómo ayudan los consejeros escolares a los estudiantes?

Los consejeros escolares están capacitados para ayudar a los alumnos con todo tipo de cosas. Su rol es diferente en cada escuela, pero estas son algunas de las cosas que la mayoría de los consejeros escolares pueden hacer.

  • Los consejeros escolares pueden ayudarte con la escuela y la planificación de tus estudios profesionales. Por ejemplo, pueden hacer lo siguiente:
    • ayudarte a planificar tus horarios
    • enseñarte técnicas y habilidades de estudio
    • ayudarte si estás teniendo problemas en la clase o si quieres mejorar tus calificaciones
    • darte consejos sobre las clases que debes tomar para entrar en la universidad de tus sueños
    • orientarte para saber cómo prepararte para los exámenes SAT
    • ofrecerte consejos sobre cómo escribir un ensayo para postularte a una universidad o sobre cómo preparar tu postulación a un trabajo
    • ayudarte a buscar información sobre carreras profesionales y a planificar tu vida después de la escuela secundaria
    • ofrecer apoyo escolar a los alumnos que necesitan ayuda o darte un salón de clases tranquilo donde los alumnos pueden hacer las tareas escolares
  • Los consejeros pueden ayudar con problemas personales. Están capacitados para hacer lo siguiente:
    • escuchar atentamente
    • ofrecer apoyo cuando quieras compartir un problema
    • hablar sobre tus preocupaciones y ayudarte a tomar buenas decisiones
    • buscar más ayuda si lo necesitas
  • Algunos consejeros escolares dirigen grupos de apoyo para estudiantes que están atravesando problemas similares. Pregúntale a tu consejero qué grupos de apoyo hay en tu escuela. Por ejemplo, algunas escuelas tienen grupos para:
    • estudiantes LGBTQ+
    • estudiantes con ansiedad social
    • afrontar un duelo cuando fallece un ser querido 
    • aprender a practicar la conciencia plena
    • mejorar tus técnicas de estudio

¿Cómo hago para ver a un consejero?

La forma de ver a un consejero es diferente en cada escuela. Tal vez te asignen un consejero (o tutor) al comenzar el año escolar. O quizás tu escuela permita que tú mismo te acerques a la oficina de consejeros. El consejero escolar podría visitar cada clase y hacerles saber a los estudiantes cómo pueden hacer para conversar con él.

También puedes visitar el sitio de tu escuela o acercarte a alguien de la oficina escolar o a un maestro de confianza para averiguar cómo ver al consejero. En la mayoría de las escuelas, los alumnos pueden hacer una cita con el consejero para hablar de lo que los preocupa.

¿Y si no tienes un problema?

Los alumnos pueden hablar con los consejeros sobre otras cosas, además de los problemas. Tal vez tengas ideas para hacer que la escuela sea más acogedora para los nuevos estudiantes. O quieras recaudar fondos para una causa que te parece importante. Quizás te gustaría comenzar un grupo de acción contra el cambio climático o un grupo que pueda ayudar a detener la violencia juvenil. O podrías estar interesado en reunir a estudiantes voluntarios para ayudar a estudiar a niños más pequeños. El consejero escolar podría ser la persona indicada para que esto se haga realidad.

Aunque no tengas un problema, el consejero escolar puede ser una buena persona que vale la pena conocer. Podría convertirse en un mentor de gran ayuda; alguien que pueda orientarte a lo largo de la escuela secundaria o ayudarte a elegir una carrera profesional acorde a tus fortalezas. Por lo tanto, pasa a saludarlo. Cuéntale sobre lo que te hace bien. Y si necesitas su ayuda o sus consejos, ¡sólo díselo!

Revisor médico: D'Arcy Lyness, PhD