Qué pueden hacer los padres
La crianza es tan importante como cualquier otra parte del tratamiento del TDAH.
La manera en la que los padres respondan puede mejorar el TDAH; o empeorarlo.
Si a su hijo le diagnosticaron TDAH:
Involúcrese. Aprenda todo lo posible acerca del TDAH. Siga
el tratamiento que le recomiende el profesional de su hijo. Acuda a todas las citas
de terapia recomendadas. Si su hijo toma medicamentos
para el TDAH, déselos en el momento en que se lo recomienden. No cambie
la dosis sin consultar a su médico. Conserve todos los medicamentos de su hijo
en un lugar seguro al que otras personas no tengan acceso.
Sepa de qué manera afecta el TDAH a su hijo. Todos los
niños son diferentes. Identifique las dificultades que su hijo tiene debido
al TDAH. Algunos niños necesitan mejorar su habilidad de prestar atención
y escuchar. Otros necesitan aprender a calmarse. Pídale al terapeuta
de su hijo que le dé consejos y le enseñe maneras de ayudar a su hijo
a practicar y mejorar.
Concéntrese en enseñarle a su hijo una cosa por vez.
No intente trabajar en todo al mismo tiempo. Comience por pequeñas cosas. Escoja
una cosa para concentrase en eso. Elogie a su hijo por su esfuerzo.

Aplique la disciplina objetivamente y con cariño. Aprenda
cuáles son los mejores enfoques de disciplina para un niño con TDAH
y qué cosas pueden empeorar el TDAH. Obtenga consejos del terapeuta de su hijo
sobre las maneras de responder al comportamiento de su hijo. Los niños con
TDAH tal vez sean sensibles a las críticas. La mejor manera de corregir su
comportamiento consiste en hacerlo de forma alentadora y comprensiva en lugar de con
castigos.
Establezca expectativas claras. Antes de ir a algún lugar,
hable con su hijo para explicarle cómo quiere que se comporte. Ponga más
energía en enseñarle a su hijo qué hacer en lugar de reaccionar
a lo que no debe hacer.
Hable. No tenga miedo de hablar con su hijo acerca del TDAH. Ayude
a los niños a comprender que no es su culpa tener TDAH y que pueden aprender
formas de mejorar los problemas que esto les causa.
Pasen un tiempo especial juntos todos los días. Hágase
un tiempo para conversar y disfrutar de relajarse y hacer actividades entretenidas
con su hijo; aunque solo sean unos pocos minutos. Dele a su hijo toda su atención.
Elogie los comportamientos positivos. No lo elogie en exceso, pero haga un comentario
cuando su hijo haga algo bien. Por ejemplo, cuando su hijo espere su turno, dígale
"Qué bien estás esperando tu turno".
Lo más importante es su relación con su hijo. Con
frecuencia, los niños con TDAH sienten que están decepcionando a otros,
que están haciendo las cosas mal y no están siendo "buenos". Proteja
la autoestima de su hijo siendo paciente, comprensivo y tolerante. Hágale saber
a su hijo que cree en él y que ve todas las cosas buenas que tiene. Desarrolle
la resiliencia manteniendo una relación positiva y cariñosa con su hijo.
Trabaje con la escuela
de su hijo. Hable con los maestros de su hijo para saber si el niño
debería tener un IEP.
Reúnase con el maestro de su hijo frecuentemente para saber cómo le
está yendo a su hijo. Trabaje con el maestro para ayudar a su hijo a salir
adelante.
Conéctese con otras personas para recibir apoyo y conocimientos.
Únase a una organización da apoyo para el TDAH, como CHADD para recibir
novedades sobre tratamiento e información, etc.
Averigüe si usted tiene TDAH. Con frecuencia, el TDAH se
hereda. Los padres (u otros parientes) de los niños con TDAH tal vez no sepan
que también lo padecen. Cuando los padres con TDAH reciben un diagnóstico
y tratamiento, esto los ayuda a ser mejores padres.
Fecha de revisión: noviembre de 2017