Una quemadura solar puede ocurrir después de estar 15 minutos al sol, pero el enrojecimiento de la piel y las molestias pueden no aparecer hasta pocas horas después. Las quemaduras solares repetidas pueden llevar a tener cáncer de piel. Exponerse al sol sin protección es incluso más peligroso para niños que tienen lunares o pecas, piel y pelo muy claros o antecedentes familiares de cáncer de piel.
¿Cuáles son los signos y los síntomas de las quemaduras solares?
Haga que su hijo lleve ropa que lo proteja del sol, gafas de sol y gorra.
Aplíquele un protector solar con protección UVB y UVA con un factor de protección solar (FPS) mínimo de 30.
Aplíquele el protector solar de 15 a 30 minutos antes de iniciar la exposición solar y 30 minutos después de iniciarla, luego vuélvaselo a aplicar después de que su hijo haya estado sudando o nadando.
Aunque la mejor forma de proteger del sol a bebés de hasta 6 meses de edad consiste en mantenerlos en zonas que estén a la sombra, puede usar cantidades reducidas de protector solar (con un FPS mínimo de 30) sobre pequeñas áreas de piel que se expongan al sol, como la cara.