Hoja informativa sobre las alergias alimentarias (para las escuelas)

Qué deben saber los educadores

Las alergias alimentarias ocurren cuando el sistema inmunitario, que normalmente lucha contra las infecciones, reacciona a un alimento como si se tratara de un invasor. El sistema inmunitario responde liberando sustancias químicas, como la histamina, dentro del cuerpo, lo que desencadena una reacción alérgica. 

Hay muchos niños que tienen alergias alimentarias. Las alergias alimentarias más frecuentes son a los cacahuetes y otros frutos secos, el marisco (pescado y/o crustáceos), los productos lácteos, el huevo, la soja y el trigo.

Las reacciones alérgicas a los alimentos pueden ser leves, o graves (de riesgo vital). No hay forma alguna de predecir la gravedad de la reacción alérgica de una persona, porque este tipo de reacciones pueden ser diferentes cada vez que ocurren. Por eso es importante conocer los síntomas de las reacciones alérgicas y tener un plan de acción para las alergias alimentarias.

Trabajando con su alumno y su familia, puede ayudarlo a evitar el alimento al que sea alérgico en la escuela y a tener una mejor experiencia educativa. 

Desafíos para los alumnos con alergias alimentarias

Los alumnos con alergias alimentarias pueden necesitar:

• llevar encima epinefrina (adrenalina) para las emergencias
• llevar puesta una pulsera de alerta médica
• ir a la enfermería de la escuela para tomar medicamentos o evaluar sus reacciones
• disponer de unas adaptaciones especiales para sentarse durante las comidas a fin de evitar exponerse a sus alérgenos (como los cacahuetes).  
• tener comidas y tentempiés alternativos a las horas de comer, de picar entre comidas y en las fiestas que se celebren en la clase. 

Qué pueden hacer los educadores

Hable con su alumno y sus padres sobre:

• El plan de acción contra la alergia alimentaria y sus instrucciones. El personal de la enfermería escolar y todos sus profesores deben disponer de una copia del plan.
• El dispositivo de epinefrina. En función de la edad que tenga el alumno, él podrá o no llevarlo siempre encima. En el caso de los alumnos más jóvenes, la epinefrina la suele llevar el profesor o el personal de la enfermería escolar. Asegúrese de saber dónde se guarda la epinefrina de su alumno. 
• Si su alumno corre el peligro de sufrir una reacción al tocar o inhalar aquello a lo que es alérgico.
• Qué debe y qué no debe comer su alumno en la escuela. Los padres del alumno tal vez prefieran enviar a la escuela o facilitar un listado de tentempiés y bebidas seguros. O es posible que se sientan cómodos si usted o su hijo comprueba cuáles son los ingredientes de cada alimento o bebida antes de su ingesta. 
• Cualquier otra instrucción especial.

Conozca los síntomas de las reacciones alérgicas. Si su alumno presenta alguno de estos síntomas, siga su plan de acción contra la alergia alimentaria:

• picor, erupción o urticaria (ronchas rojas en la piel)
• moqueo nasal o congestión nasal (nariz tapada)
• picor ocular, ojos llorosos
• tos, resuello, sibilancias (hacer "pitos" al respirar), dificultades para respirar
• dolor abdominal, náuseas, vómitos o diarrea
• opresión de garganta y afonía o ronquera
• sensación de desfallecimiento, mareos, desmayo

Dele epinefrina y llame al teléfono de emergencias (911)si su alumno presenta síntomas graves, como dificultades para respirar, sibilancias (hacer "pitos" al respirar), muchos vómitos, opresión de garganta o desmayo. La epinefrina funciona mejor cuando se administra durante los primeros minutos de una reacción alérgica grave. Dele la epinefrina incluso si usted no está completamente seguro de si su alumno la necesita. No le hará ningún daño y, si no se la diera, sus síntomas podrían empeorar. 

Si se sirven alimentos/bebidas en clase, ayude a su alumno a evitar el o los alérgenos (las sustancias que le provocan reacciones alérgicas):

• Si la familia de su alumno ha enviado su propia comida o bebida, sírvasela a su alumno.
• Si usted le sirve comida o bebida a su alumno, lea todas las etiquetas para comprobar sus ingredientes. No dé a su alumno tentempiés enviados por otras familias a menos que se puedan leer bien sus etiquetas para comprobar cuáles son sus ingredientes. 
• Tenga mucho cuidado con la contaminación cruzada. Cualquier tabla de cortar, utensilio o recipiente de almacenamiento se debe limpiar bien con agua y jabón antes de utilizarlo para preparar o cocinar alimentos. 

Otros aspectos importantes:

• Disponga de un plan para que los profesores sustitutos conozcan las alergias alimentarias de su alumno. 
• Recuérdele a su alumno que no debe tomar alimentos de otras personas mientras esté en la escuela.
• Ayude a su alumno a confiar en sí mismo, reconociendo y valorando sus puntos fuertes: en la lectura, el deporte, el teatro, el arte o cualquier otra disciplina que le guste. 
• Apóyelo. Si cree que su alumno está muy preocupado por sus alergias alimentarias, hable con él y con su familia sobre las opciones de orientación y asesoramiento en la escuela o en la comunidad. Algunos distritos escolares no requieren el permiso paterno para que un alumno vea a un orientador en su escuela, mientras que hay otros que sí. Consulte la normativa de su distrito escolar.