La revisión de su hijo cuando tenga 6 meses
¿Qué
puede esperar durante esta visita?
Lo más probable es que el pediatra y/o el personal de enfermería
que atienden a su hijo hagan lo siguiente:
1. Midan el peso, la longitud (o estatura) y el perímetro cefálico
del bebé y representen estas medidas en las curvas
de crecimiento.
2. Le hagan preguntas, le resuelvan inquietudes y le den consejos
sobre los siguientes aspectos relacionados con su bebé:
Alimentación. Si todavía no ha introducido
los sólidos en la dieta de su bebé, este es el momento en que lo
ha de hacer. Empiece con una papilla que solo contenga un tipo de cereal y que esté
enriquecida con hierro o un puré de carne. Informe al pediatra si su bebé
presenta cualquier reacción a un nuevo alimento (vómitos, diarrea, erupciones).
La leche materna o la artificial siguen siendo la principal fuente alimenticia de
su hijo.
Orina y deposiciones. Es posible que perciba algún cambio
en las deposiciones de su hijo tras la introducción de los sólidos en
su dieta. El color y la consistencia de las heces pueden variar dependiendo de lo
que haya ingerido. Informe al pediatra si las heces de su hijo se volvieran duras,
secas o difíciles de expulsar o si tuviera diarrea.
Sueño. A los 6 meses, los bebés duermen un promedio
de 12 a 16 horas cada
día, incluyendo dos periodos de sueño durante las horas de luz. La mayoría
los bebés de esta edad "duermen toda la noche de un tirón", alargando
el sueño nocturno a por lo menos 6 horas seguidas.
Desarrollo. Alrededor de los 6 meses, es habitual que muchos bebés:
- levanten la vista al escuchar su nombre
- empiecen a decir "ba", "da" y "ga" y a balbucear
sonidos encadenados ("bababababa") y hagan burbujas con la boca (saliva)
- extienden el brazo para alcanzar objetos y los agarren
- dominen la prensión global o imprecisa, utilizando todos los dedos a la
vez para arrastrar y agarrar objetos
- se pasen un objeto de una a otra mano
- se den la vuelta en ambos sentidos cuando estén estirados (de la postura
de estar sobre la panza a la de estar sobre la espalda y viceversa)
- se sienten apoyando la espalda
Existe una gran variabilidad dentro de lo que se considera normal y, además,
los niños se desarrollan a ritmos diferentes. Hable con el pediatra de su hijo
si le preocupa algún aspecto de su desarrollo.
3. Hagan una exploración
física al bebé desvestido mientras usted está presente.
Esta incluirá explorar los ojos del bebé, auscultarle el corazón,
tomarle el pulso, comprobar el estado de sus caderas y prestar atención a sus
movimientos.
4. Actualicen sus vacunas. Las vacunas protegen a los bebés
de importantes enfermedades propias de la infancia, de modo que es fundamental que
su hijo las reciba a tiempo. Los programas de vacunación pueden variar entre
distintos consultorios médicos; por lo tanto, pregunte al pediatra al respecto.
De cara al futuro
He aquí algunas de las cosas que deberá tener en cuenta hasta la
próxima revisión, que tendrá lugar cuando su hijo tenga 9
meses:
Alimentación
- Si amamanta a su bebé, siga haciéndolo hasta que
su hijo cumpla 12 meses, siempre y cuando la lactancia siga siendo agradable para
las dos partes implicadas. Los bebés amamantados que se destetan antes de los
12 meses deben recibir leche artificial enriquecida con hierro. Espere a que su hijo
tenga 1 año para pasar de la leche artificial a la leche de vaca.
- Empiece a dar a su bebé alimentos sólidos:
- Si cuenta con antecedentes familiares de alergias alimentarias,
hable con el pediatra de su hijo antes de introducir los sólidos en la dieta
del bebé.
- Empiece con cantidades reducidas de cereales enriquecidos con hierro preparados
con leche materna o artificial. Puede comenzar a darle purés de carne y alimentos
que contengan hierro.
- Utilice una cucharita para bebés, no introduzca los cereales de la papilla
dentro del biberón.
- Espere a que su bebé ingiera eficazmente la papilla de cereales o el puré
de carne con cucharita antes de intentar introducir nuevos alimentos que contengan
un solo tipo de ingrediente (como el puré de frutas, el de verduras y el de
carne).
- Introduzca solo un alimento cada vez y espere de varios días a una semana
entera para observar posibles reacciones alérgicas antes de introducir un nuevo
alimento.
- En los meses que se avecinan, deberá ir ofreciendo a su bebé de
forma gradual alimentos de distintas texturas: tamizados, en puré, en compota
o en grumos blandos. Cuando le introduzca alimentos
que se comen con la mano, lo que suele ocurrir alrededor de los nueve
meses de edad, escoja porciones pequeñas de alimentos bandos y evite aquellos
que puedan causar asfixia
por aspiración (como uvas enteras, trozos de verdura cruda, pasas,
palomitas de maíz, perritos calientes, queso duro o pedazos de carne).
- Preste atención a los signos de que su bebé tiene hambre
o está lleno.
- No dé jugo a su hijo hasta que cumpla 12 meses, a no ser que se lo recomiende
el médico.
- Hable con el pediatra sobre la posibilidad de dar a su bebé suplementos
de flúor.
- Si lo amamanta, siga dándole suplementos de vitamina D.
Los bebés amamantados pueden necesitar suplementos de hierro hasta que obtengan
una cantidad suficiente de ese mineral a partir de los alimentos que ingieren.
- No acueste al bebé tomando el biberón.
Cuidados cotidianos
- A muchos bebés les empiezan a salir los dientes de leche
alrededor de los 6 meses. Para aliviar el dolor y las molestias
de la dentición, frote las encías de su bebé con un dedo
limpio. U ofrézcale un juguete mordedor o una toallita húmeda, que puede
congelar durante 30 minutos antes de dárselos.
- Limpie las encías de su bebé con un paño húmedo para
eliminar las bacterias. Cuando le salgan los dientes a su hijo, utilice un cepillo
de dientes blando para bebés con un poquito de pasta de dientes (del
tamaño aproximado de un granito de arroz) para limpiarle los dientes dos veces
al día.
- Entre los 6 y los 9 meses, es posible que bebés que antes dormían
toda la noche de un tirón se empiecen a despertar por las noches.
Si este es su caso, dele tiempo a su hijo para que se calme. Si sigue estando inquieto
e irritable, intente consolarlo trasmitiéndole el mensaje de que usted está
a su lado, pero intente no levantarlo en brazos, jugar con él ni alimentarlo.
- Cante, hable, lea,
y juegue con su bebé. Los bebés aprenden mejor
relacionándose con la gente.
- La TV, los videos u otro tipo de medios de comunicación no son recomendables
para los niños de esta edad.
- Cree un
espacio seguro y a prueba de niños donde su hijo se pueda mover,
jugar y explorar.
- Es frecuente que las madres primerizas estén cansadas
y se sientan agobiadas a veces. Pero, si estas emociones
son intensas, o usted está muy triste, malhumorada o ansiosa, llame al médico.
- Hable con su médico si le preocupa su situación vital.
¿Dispone de todo lo que necesita para cuidar de su bebé? ¿Dispone
de suficiente comida, de un lugar seguro donde vivir y de seguro
médico? Su médico le puede informar sobre recursos de la comunidad
o derivar su caso a un trabajador social.
Seguridad
- Acueste al bebé boca arriba, aunque no pasa nada
si él se da vuelta mientras duerme.
- No utilice un andador. Los andadores son peligrosos
y pueden causar lesiones graves. Además, los andadores no solo no favorecen
el aprendizaje de la conducta de andar sino que, de hecho, lo pueden dificultar.
- Cuando su hijo esté despierto, no lo deje desatendido,
sobre todo cuando se encuentre sobre superficies elevadas o dentro de la bañera.
- Mantenga cualquier objeto de tamaño pequeño y cualquier
sustancia nociva fuera del alcance del bebé.
- Cuando viajen en coche, siente siempre al bebé en una silla de
seguridad orientada en el sentido apuesto al de la marcha y colocada en los
asientos traseros.
- Evite exponerlo
al sol, cubriendo su piel y colocándolo en la sombra siempre que
sea posible. Puede utilizar crema de protección solar (con un FPS -factor de
protección solar- de 30) si ni la sombra ni las ropas que lleva le ofrecen
una protección suficiente.
- Ponga su casa a
prueba de niños. Póngase en cuatro patas y observe su casa
en busca de posibles riesgos. Mantenga las puertas cerradas y coloque vallas de seguridad,
sobre todo para acceder a las escaleras.
- Limite el tiempo durante el cual su hijo sea fumador
pasivo, ya que este tiempo incrementa el riesgo de padecer enfermedades
cardiacas y pulmonares. Ser fumador pasivo del vapor de los
cigarrillos electrónicos
también es nocivo.
Estas listas de recomendaciones son congruentes con las guías de la
Academia Americana de Pediatría (AAP) (Directrices Futuros Brillantes o "Bright
Futures Guidelines" en inglés).
Fecha de revisión: julio de 2017
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