¿Cómo le tomo la temperatura rectal a mi hijo?

La mejor manera de tomar la temperatura a bebés y niños pequeños es hacerlo por la vía rectal. Pero no se preocupe: es un proceso sencillo y seguro.  

Primero:

• Si su bebé se acaba de bañar, ha estado tapado con muchas sábanas o lleva muchas capas de ropa (o está hecho un arrullo), espere 20–30 minutos antes de ponerle el termómetro.  
• Use un termómetro digital. No use un termómetro de vidrio, porque no son seguros. 
• Lave el extremo del termómetro con agua y jabón y enjuáguelo bien con agua.
• Humedezca o lubrique el extremo del termómetro con un lubricante, como la vaselina. 

Luego, coloque a su hijo en una de estas posiciones: 

• acostado boca abajo en su propio regazo o sobre una superficie plana y firme, y ponga la palma de la mano sobre la zona lumbar del niño. 

• acostado boca arriba con las piernas flexionadas contra el pecho, y sostenga con la mano la parte posterior de los muslos de su hijo.  

Con la otra mano: 

• Introduzca el termómetro lubricado en la abertura anal entre media y una pulgada (de 1,25 a 2,5 centímetros), o hasta que la punta del termómetro quede completamente dentro del recto. Deténgase si nota cualquier tipo de resistencia.
• Sujete el termómetro entre los dedos índice y medio mientras hueca la mano sobre la cola de su bebé. Tranquilice a su hijo y háblele en voz baja y calmada mientras sostiene el termómetro en su lugar.

• Espere hasta que suene el número de pitidos correspondientes u otra señal que indique que ya se puede leer la temperatura. Anote la temperatura que aparezca en la pantalla, así como la hora del día en que haga la lectura. 
• Una lectura de 100,4°F (38°C) o superior significa que su hijo tiene fiebre. 
• Lave el termómetro con agua y jabón y etiquételo como de uso rectal para que solo se use para tomar la temperatura por esta vía.