Hay muchas responsabilidades pequeñas pero importantes que debes ir asumiendo
a medida que te vayas convirtiendo en un adulto. Lavar tu ropa. Asegurarte de que
la flecha que indica el nivel de gasolina en el coche que conduces está lejos
del cero. Saber cómo obtener tus medicamentos con receta.
Es cierto, es posible la última responsabilidad no sea una de las primeras
cosas que te vengan a la mente. Aún y todo, es un paso importante hacia la
independencia. Significa que empiezas a hacerte responsable de tus propios cuidados
médicos.
En la consulta del médico
El proceso de obtener una receta empieza en la consulta del médico o en
la clínica o centro de salud a donde vayas. Si estás tomando algún
medicamento, aunque sea de venta sin receta médica, como unas vitaminas o un
medicamento elaborado con plantas medicinales, díselo a tu médico. En
algunos medicamentos, existe el riesgo de que sean perjudiciales si se toman al mismo
tiempo (en medicina, esto se conoce como interacción). Por
ejemplo, hay algunos medicamentos de venta con receta médica que pueden hacer
que las píldoras anticonceptivas sean menos eficaces.
En lo que respecta a la anticoncepción, lo más probable es que el
médico te pregunte sobre si usas métodos anticonceptivos y también
sobre si consumes alcohol o drogas ilegales. Tal vez te resulte violento hablar de
estos temas, pero tu médico necesita saber si estás tomando algo que
podría interactuar con el medicamento que te quiere recetar. Pero no te preocupes;
tu médico no está ahí para juzgarte ni para informar a tus padres
sobre lo que le expliques. Muchos médicos encuentran una manera de hablar en
privado con sus pacientes en edad adolescente para poder compartir información
confidencial. Por lo tanto, no dudes en hablar con él abiertamente.
Es posible que tu médico te entregue una receta por escrito para que la
lleves a la farmacia que elijas. De todos modos, muchos médicos envían
sus recetas por vía electrónica, en cuyo caso, tu médico te preguntará
en qué farmacia te gustaría recoger el medicamento.
Si vas a estar fuera de casa durante un tiempo, tal vez prefieras recoger tus medicamentos
recetados en una farmacia que pertenezca a una gran cadena. La mayoría de las
cadenas usan la misma base de datos en todos sus establecimientos, lo que te permitirá
recoger tus medicamentos en distintas farmacias de la misma cadena.
Antes de cumplimentar tu receta, averigua si el medicamento está cubierto
por tu seguro médico. Algunos medicamentos pueden no estar cubiertos. Por ejemplo,
es posible que tu compañía no cubra ciertos medicamentos para el acné
o que tu médico deba ponerse en contacto con tu compañía para
que los aprueben. En tal caso, te deberían informar al respecto para no tener
sorpresas en la farmacia. Generalmente, el número al que el médico debe
llamar está en la cara posterior de la tarjeta del seguro médico.