Si el niño se desmaya durante un espasmo de sollozo
Por lo general, usted no tiene que hacer nada cuando su hijo tiene un espasmo de
sollozo. Su hijo debe quedarse recostado hasta que el sollozo termine.
Si su hijo se desmaya durante un tiempo breve, mantenga la calma y haga lo siguiente:
- verifique que su hijo no tenga comida en la boca ni ningún objeto que pudiera
provocar asfixia por
aspiración una vez que su hijo recupera la conciencia.
- retire todos los objetos o los muebles que pudieran estar al alcance del niño
en caso que tuviera una convulsión.
Los niños que sufren de espasmos de sollozos por lo general comienzan a
respirar en un minuto.
Llame al 911 si su hijo permanece azul o si deja de respirar por
más de un minuto.
Cuándo se debe ir al médico
Si éste es el primer espasmo de sollozo de su hijo, solicite asistencia
médica. Aunque los espasmos de sollozo no son perjudiciales, a veces pueden
ser un signo de algún problema de salud no detectado y se debería verificar
que no sea el caso.
La mayoría de los espasmos de sollozo son una respuesta a una emoción
fuerte (como enfado, miedo o frustración), pero algunos están provocados
por problemas de salud, como un trastorno convulsivo, arritmia cardíaca o una
anemia por deficiencia de hierro. Si se tratan estos problemas se puede reducir la
frecuencia de los espasmos de sollozo.
Si se descarta la existencia de algún otro problema, el médico puede
ayudar a los padres a descubrir qué es lo que ha provocado el espasmo del niño,
como evitar futuros espasmos y cómo actuar si se vuelven a producir.
Prevenir futuros espasmos
Una vez los niños desarrollan mejores habilidades para enfrentar las situaciones
difíciles, suelen superar los espasmos de sollozos. Pero mientras tanto, los
padres pueden encontrarse con un reto mayor que ser testigos de estos episodios: encontrar
una manera de educar al niño para que no se provoque otro espasmo.
Su pediatra puede contribuir a lograr este delicado equilibrio ayudándoles
a usted y a su hijo a encontrar mejores estrategias para enfrentar estas situaciones.
Intente no ceder ante las rabietas y el comportamiento obstinado; los niños
pequeños necesitan límites y normas para sentirse seguros y mantener
un equilibrio emocional.
Con la experiencia, valor y la ayuda de su pediatra, aprenderá cómo
actuar cuando se produzca un espasmo de sollozo y a proporcionar a su hijo un ambiente
seguro y estructurado hasta que supere los espasmos.
Fecha de revisión: octubre de 2016