Empecemos con una buena noticia:
la enfermedad de Osgood-Schlatter da mucho menos miedo que su nombre. Aunque es una
de las causas más frecuentes del dolor de rodilla durante la adolescencia,
en el fondo, no se trata de una enfermedad, sino de una lesión por sobreuso
(uso excesivo o repetitivo). La enfermedad de Osgood-Schlatter puede resultar bastante
dolorosa, pero se suele resolver en un plazo de 12 a 24 meses.
Sobre la enfermedad de Osgood-Schlatter
La enfermedad de Osgood-Schlatter es una inflamación del hueso, cartílago
y/o tendón de la parte superior del hueso de la canilla (tibia), el lugar donde
se adhiere el tendón de la rótula. Lo más frecuente es que solo
afecte a una rodilla.
La enfermedad de Osgood-Schlatter suele afectar a adolescentes activos en torno
al principio del estirón, el período de aproximadamente 2 años
durante el cual crecen muy deprisa. Los estirones pueden empezar en cualquier momento
entre los 8 y los 13 años en las niñas, y entre los 10 y los 15 en los
niños. La enfermedad de Osgood-Schlatter antes era más frecuente en
los niños que en las niñas pero, como cada vez hay más niñas
que hacen deporte, esto está cambiando.
El riesgo de que un adolecente desarrolle la enfermedad de Osgood-Schlatter se
incrementa con la practica de deportes que implican correr, hacer giros y saltar,
como el baloncesto, el fútbol americano, el voleibol, el fútbol, el
tenis, el patinaje artístico y la gimnasia. No existe un acuerdo general entre
médicos sobre cuál es el mecanismo que origina la lesión pero
todos ellos coindicen en que participa el sobreuso (uso excesivo o repetitivo) y la
sobrecarga.
Los niños son más vulnerables durante el estirón porque en
esta fase sus huesos, músculos y tendones crecen muy deprisa y no siempre al
mismo ritmo. Con el ejercicio, las diferencias en tamaño y fuerza entre los
distintos grupos musculares ejercen una sobrecarga excesiva sobre la placa epifisaria
de la parte superior de la canilla. (La placa epifisaria es una capa de cartílago
próxima al extremo del hueso donde ocurre la mayor parte del crecimiento óseo.
Es más débil y más vulnerable a las lesiones que el resto del
hueso).
La mayoría de los padres llaman al pediatra cuando su hijo lleva varios
meses quejándose de dolor de forma intermitente. El dolor puede ser de débil
y sentido solo durante la actividad a intenso y constante.
Entre los síntomas de la enfermedad de Osgood-Schlatter, también
se incluyen los siguientes:
- el dolor empeora con el ejercicio
- el dolor se alivia con el descanso
- hinchazón y/o sensibilidad a la presión y el tacto debajo la rodilla
y sobre la parte superior de canilla
- cojera después de hacer ejercicio
- tensión en los músculos que hay alrededor de la rodilla (los isquiotibiales
y el cuádriceps)
Síntomas que no son propios de la enfermedad de Osgood-Schlatter son el
dolor en reposo, dolor en el muslo o un dolor muy fuerte que despierta al niño
por la noche o que lo hace llorar. Si su hijo tiene cualquiera de estos síntomas,
hable con su pediatra.