Su hijo tiene dolor de garganta, tos
y fiebre elevada.
¿Es COVID-19?
¿Podría tratarse de una gripe?
¿O es simplemente un resfriado
común?
Todas estas enfermedades son causadas por virus
que infectan las vías
respiratorias. Todas son contagiosas y se pueden transmitir con facilidad de una
persona a otra. Y, además, provocan algunos síntomas similares. Por
eso puede resultar difícil diferenciarlas.
A continuación, encontrará algunas cosas a las que debe prestar atención
si su hijo está enfermo.
Resfriado común (causado por muchos tipos de virus)
Los síntomas de un resfriado suelen ser leves. Con frecuencia, incluyen
cosquilleo en la garganta, congestión o goteo nasal y estornudos. Si hay fiebre,
no suele ser
alta. Por lo general, los niños con un resfriado común se sienten
bastante bien, tienen buen apetito y un nivel normal de energía.
No existe ninguna prueba para los resfriados comunes y tampoco hay un tratamiento
específico. Solo deben completar su ciclo.
Gripe (provocada por el virus de la influenza)
La gripe también puede ser leve. Sin embargo, los niños que tienen
gripe suelen sentirse peor que cuando tienen un resfriado común. Tal vez tengan
fiebre de manera repentina, con escalofríos, dolor
de cabeza y dolor muscular. También pueden tener dolor de garganta, goteo
nasal y tos. Además, suelen sentirse mal, cansados y no tienen mucho apetito.
Algunos niños incluso tienen dolor abdominal, náuseas, vómitos
o diarrea.
El médico puede controlar si alguien tiene gripe haciendo una prueba en
la que se busca el virus de la gripe.
La mayoría de los niños con gripe mejoran
en el hogar con mucho líquido, reposo y descanso. En algunos casos, es
posible que el médico prescriba un medicamento antiviral para aliviar los síntomas
y acortar el ciclo de la enfermedad. Algunas personas se enferman gravemente y necesitan
tratamiento en el hospital.
Muchos casos de gripe se pueden prevenir con la aplicación de la vacuna
antigripal todos los años.
COVID-19 (causada por un tipo de coronavirus)
Los niños que se infectan con coronavirus tal vez no tengan ningún
síntoma o tengan síntomas leves, similares a los de un resfriado común.
Algunos pueden tener síntomas más graves, similares a los de la gripe.
Por lo tanto, los síntomas de COVID-19 pueden asemejarse mucho a los de los
resfriados o la gripe. Pero uno de los síntomas que se presenta con más
frecuencia en los enfermos de COVID-19 es la pérdida del sentido del gusto
y del olfato.
Para saber si una persona tiene coronavirus, los médicos hacen
una prueba en la que se busca el virus en las vías respiratorias. También
pueden comprobar si hubo una infección en el pasado haciendo un análisis
de sangre en busca de anticuerpos.
No existe un medicamento específico para el COVID-19. La mayoría
de las personas con COVID-19 mejoran
en el hogar si beben mucho líquido, hacen reposo y descansan. Algunas
personas se enferman gravemente y necesitan tratamiento en el hospital.
Las vacunas contra el COVID-19 están disponibles para personas mayores de
16 años. Los trabajadores de la salud y las personas con alto riesgo de enfermarse
gravemente, si contraen el virus, han sido los primeros en vacunarse. El resto de
los adultos y los adolescentes mayores de 16 años podrán recibir la
vacuna en la primavera y el verano de 2021. Se están realizando estudios para
ver si las vacunas son seguras y efectivas en niños menores de 16 años.
¿Cuándo debería llamar al médico?
Si tiene alguna duda o pregunta, es conveniente que llame al médico. Una
enfermedad que empieza pareciendo un resfriado puede acabar convirtiéndose
en una gripe o en COVID-19. Y al igual que otras enfermedades, como la faringoamigdalitis
estreptocócica o la neumonía,
puede causar síntomas similares pero requiere un tratamiento diferente. A veces,
es difícil saber realmente qué germen está causando el problema.
Entonces, los médicos pueden hacer algunas pruebas para determinarlo.
Obtenga ayuda médica de inmediato si su hijo presenta los siguientes síntomas:
- parece estar empeorando
- tiene dificultades para respirar
- tiene fiebre alta
- tiene un fuerte dolor de cabeza
- tiene dolor de garganta
- parece confundido
- tiene un fuerte dolor abdominal
- tiene dolor u opresión en el pecho
- tiene dificultad para permanecer despierto
- tiene los labios o la cara azulados
Llame inmediatamente al médico si su hijo tiene asma
u otra enfermedad y comienza a sentirse enfermo con síntomas que podrían
indicar la presencia de una gripe o de COVID-19. Tal vez, el médico quiera
hacer algunas pruebas o comenzar a darle un medicamento específico para la
gripe.
¿Qué pueden hacer los padres?
Las medidas comunes que pueden ayudar a prevenir
el contagio de gérmenes también funcionan bien contra el resfriado
común, la gripe y el COVID-19. Siempre es bueno hacer lo siguiente:
- Lavarse las
manos a fondo y con frecuencia. Láveselas durante por los menos 20 segundos
seguidos con agua y jabón o bien usar un gel antiséptico o desinfectante
para las manos que contenga como mínimo un 60% de alcohol.
- Evitar a las personas que parecen estar enfermas.
- Limpiar las superficies con las que hay mucho contacto (como perillas de puertas,
encimeras, teléfonos, etc.).
Durante la pandemia de coronavirus, todas las personas de la familia deben hacer
lo siguiente:
- Evitar los lugares concurridos.
- Mantenerse a una distancia
mínima de 6 pies de las personas con quienes no convive.
- Usar una mascarilla
en los lugares públicos (todos los adultos y niños mayores de 2 años).
- Intentar no tocarse los ojos, la nariz o la boca.
- Vacunarse contra la gripe todos los años (todas las personas mayores de
6 meses).
- Darse la vacuna contra el COVID-19 tan pronto como sea elegible.
Mantenga a su hijo en el hogar si está enfermo o si estuvo cerca de una
persona infectada con COVID-19. Hable con el médico sobre el momento en el
que su hijo puede regresar a la escuela o la guardería.
Fecha de revisión: abril de 2021