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10 maneras de ayudar a su hijo a alcanzar el éxito en la escuela media

Revisor médico: Larissa Hirsch, MD

El apoyo de los padres desempeña un papel importante para ayudar a los estudiantes a alcanzar el éxito en la escuela media. Pero, a medida que se vuelven más independientes, a los padres puede resultarles difícil saber cuándo involucrarse y cuándo es conveniente acompañarlos de manera menos visible.

Aquí encontrará 10 maneras de ayudar a su hijo a alcanzar el éxito en la escuela media.

1. Vaya a la reunión de inicio de clases y a las reuniones entre padres y maestros

Los adolescentes y preadolescentes se desempeñan mejor en la escuela cuando sus padres se involucran en su vida académica. Acudir a la reunión nocturna del inicio de clases es una excelente forma de conocer a los profesores de su hijo y sus expectativas. Los administradores de la escuela también pueden hablar de políticas y programas que afectan a toda la escuela.

Ir a las reuniones de padres y maestros es otra manera de mantenerse informado. Estas reuniones se organizan una o dos veces al año para conversar sobre el avance de su hijo. Sin embargo, algunas escuelas medias solo organizan reuniones entre los padres y los maestros si es necesario abordar temas específicos, como problemas de conducta, bajas calificaciones o si el estudiante podría beneficiarse con trabajo más avanzado en clase.

Si los niños tienen necesidades especiales de aprendizaje, otras reuniones con profesores y el personal de la escuela pueden a ayudar a los padres a diseñar o revisar los planes de educación individualizados (IEP), los planes de educación 504 o los planes de educación para niños con un talento excepcional.

Recuerde que los padres y los tutores pueden solicitar reuniones con los maestros, los directores, los consejeros escolares u otro personal de la escuela en cualquier momento durante el transcurso del año escolar.

2. Visite la escuela y su sitio web

Conocer la distribución física del edificio y el predio de la escuela puede ayudarlo a conectarse con su hijo cuando hablen acerca de su día en la escuela. Es bueno conocer la ubicación de la oficina principal, la enfermería, la cafetería, el gimnasio, los campos de atletismo, el auditorio y las clases especiales.

La sitios web de la mayoría de las escuelas incluyen información sobre lo siguiente:

  • el calendario escolar
  • los contactos del personal de la escuela
  • los eventos especiales, como viajes de estudio
  • las fechas de las pruebas
  • la información de inscripción y los horarios de los deportes, los clubes y otras actividades extracurriculares
  • las calificaciones y los deberes

Muchos profesores tienen sus propios sitios web y allí dan a acceso a libros de texto y a otros recursos, e incluyen las fechas de las evaluaciones y los trabajos para hacer en el hogar. En los sitios del distrito, de la escuela o de los profesores, se suelen ofrecer otros recursos para los padres y los estudiantes.

3. Apoye las expectativas de la tarea en el hogar

Durante la escuela media, los deberes suelen tener más intensidad y, para completarlos, los estudiantes necesitan más tiempo que el que les dedicaban en la escuela primaria. En general, tendrán que pasar entre una y dos horas por día haciendo deberes.

Una forma importante de ayudarlo es asegurarse de que su hijo tenga un lugar silencioso, bien iluminado y sin distracciones para estudiar, y que cuente con todo el material necesario. Sin distracciones significa sin teléfono, sin televisor y sin acceso a Internet salvo por los recursos relacionados con el trabajo que debe hacer. Y asegúrese de controlar de vez en cuando que su hijo no se haya distraído.

Hable habitualmente con su hijo sobre la carga de estudio y asegúrese de que haya un equilibrio. También es una buena idea fijar un horario de inicio y de finalización de la tarea todas las noches. Ayudar a su hijo a fijar un horario para los deberes y una rutina sistemática le hace comprender que lo académico es una prioridad.

Anime a su hijo a pedir ayuda cuando la necesite. La mayoría de los profesores están disponibles para ofrecer más ayuda o para quedarse después de la escuela y tal vez le puedan recomendar otros recursos.

4. Envíe a su hijo a la escuela preparado para aprender

Un desayuno nutritivo les da energía a los estudiantes de la escuela media y los prepara para el día que tienen por delante. En general, los adolescentes y preadolescentes que toman el desayuno tienen más energía y tienen un mejor desempeño en la escuela.

Ayude a mejorar el período de atención, la concentración y la memoria de su hijo con un desayuno que incluya alimentos ricos en granos integrales, fibras y proteínas, además de poco azúcar agregado. Si a su hijo se le hace tarde, envíelo a la escuela con fruta fresca, frutos secos, yogur o medio emparedado de banana y mantequilla de maní. Muchas escuelas ofrecen opciones de desayuno nutritivo antes de ingresar.

Los adolescentes y preadolescentes también necesitan dormir bien para estar alertas y listos para aprender todo el día. En general, los preadolescentes necesitan entre 9 y 12 horas de sueño cada noche y los adolescentes, aproximadamente 8 a 10 horas.

Los problemas para irse a la cama pueden empezar a esta edad por diversas razones. Los deberes, los deportes, las actividades después de la escuela, los mensajes de texto, la televisión, las computadoras y los videojuegos, además de los horarios familiares cargados, pueden hacer que los estudiantes no duerman lo suficiente. Intente evitar que los niños duerman después de la escuela para asegurarse de que puedan conciliar el sueño en un horario adecuado todas las noches.

La falta de sueño puede hacer que a los adolescentes y preadolescentes les cueste prestar atención en la escuela. Es importante tener una rutina sistemática a la hora de ir a la cama, especialmente las noches previas a un día escolar.

5. Enséñele habilidades de organización

Nadie nace con habilidades de organización; es necesario aprenderlas y ponerlas en práctica. Ser organizado es fundamental para alcanzar el éxito en la escuela media, ya que es la primera vez que la mayoría de los estudiantes tendrán varios profesores y salones de clase, o que realizarán actividades extracurriculares o después de la escuela. A los estudiantes les será útil que los padres los ayuden a organizar los trabajos asignados y a administrar el tiempo.

La información y las tareas de la clase deben estar organizadas por asignatura en organizadores, cuadernos o carpetas. Enséñele a su hijo a usar un calendario o un planificador personal para mantenerse organizado y programar sus horas de estudio. Los calendarios o planificadores también deben incluir los compromisos no académicos de su hijo para ayudarlo a administrar el tiempo.

Su hijo debe saber cómo hacer una lista de tareas diarias para priorizar las tareas y administrar el tiempo. Puede ser tan sencillo como:

  1. práctica de natación
  2. pasear al perro
  3. cena
  4. estudiar para la evaluación de estudios sociales (30 minutos)
  5. terminar el trabajo de matemática
  6. volver a leer los apuntes de la clase de ciencias (15 minutos)
  7. guardar la ropa

6. Enséñele buenos hábitos de estudio

La planificación es una parte muy importante de ayudar a su hijo en la escuela media a estudiar para las evaluaciones ahora que tiene trabajo de varios maestros.

Asegúrese de que tanto usted como su hijo sepan las fechas de las evaluaciones y planifique un tiempo de estudio suficiente antes de cada una de ellas. Cuando tenga que estudiar mucho, ayúdelo a calcular aproximadamente cuánto tiempo le llevará estudiar para cada evaluación. Después, haga un calendario de estudio para que su hijo no tenga que estudiar para varias evaluaciones el mismo día.

Recuérdele a su hijo que debe tomar apuntes en clase, organizarlos por materia y revisarlos todos los días en su casa.

Ayude a su hijo a revisar el material y a estudiar con técnicas sencillas como preguntas simples, pedirle que complete una oración con la palabra faltante y preparándole evaluaciones de práctica. Cuantos más procesos utiliza el cerebro para manejar la información (como escribir, leer, hablar y escuchar) más probable es que los estudiantes recuerden la información. Repetir palabras, leer párrafos en voz alta, volver a escribir apuntes o visualizar o diagramar la información son actividades que ayudan al cerebro a retener los datos. Recuérdele a su hijo que, en general, son necesarios varios intentos para recordar algo correctamente.

En matemáticas o ciencias, hacer problemas de práctica es una excelente manera de repasar para las evaluaciones. Su hijo puede preguntarle al profesor si hay recursos de práctica en línea.

Y recuerde que es mejor dormir bien por la noche que trasnochar para estudiar. Los estudios demuestran que los estudiantes que no duermen para estudiar tienen más probabilidades de tener dificultades en las evaluaciones al día siguiente.

7. Conozca las políticas de disciplina y hostigamiento

Las escuelas suelen incluir las políticas de disciplina (también llamadas código de conducta de los estudiantes) en los manuales del estudiante. Las reglas cubren las expectativas (y las consecuencias de no alcanzarlas) en aspectos como conducta, código de vestimenta, uso de dispositivos electrónicos y lenguaje aceptable de los estudiantes.

Las políticas tal vez incluyan detalles sobre la asistencia, el vandalismo, el hecho de copiarse en un examen, las peleas y las armas. Muchas escuelas también cuentan con políticas sobre hostigamiento o acoso escolar, como la definición del acoso por parte de la escuela, las consecuencias para los hostigadores y las víctimas, y cómo denunciar el acoso.

Su hijo debe saber qué se espera en la escuela y saber que usted apoyará las consecuencias si no cumple las expectativas. Para los niños, es más sencillo cuando las expectativas de la escuela coinciden con las del hogar. De esta manera, los niños consideran ambos entornos como lugares seguros y cuidados que trabajan conjuntamente.

8. Involúcrese

Ofrecerse como voluntario en la escuela media de su hijo es una excelente manera de demostrar que está interesado en su educación.

A algunos estudiantes de la escuela media les agrada ver a sus padres en la escuela o en los eventos escolares. Pero otros pueden sentirse avergonzados. Esté atento a la reacción de su hijo para saber qué es lo mejor y si su voluntariado debe ser menos visible. Deje en claro que no está allí para espiarlo; simplemente está intentando ayudar a la comunidad escolar.

Los padres pueden participar en lo siguiente:

  • actuar como encargado del curso
  • organizar y/o trabajar en las actividades para recaudar fondos y otros eventos especiales, como ventas de alimentos, lavado de autos y ferias del libro
  • acompañar en los viajes de estudio y los bailes
  • asistir a las reuniones del directorio de la escuela
  • unirse al grupo de padres y maestros de la escuela
  • trabajar como asistente en la biblioteca
  • actuar como mentor o tutor de los estudiantes
  • dar una charla el día de campos laborales (trabajos)
  • asistir a los conciertos, las obras de teatro y los eventos deportivos de la escuela

Visite el sitio de la escuela o del distrito escolar para encontrar oportunidades de voluntariado que se adapten a sus horarios. Incluso dedicar unas pocas horas durante el año escolar puede ser una buena impresión para su hijo.

9. Tómese en serio la asistencia de su hijo a clase

Los estudiantes de la escuela media no deben ir a la escuela si tienen fiebre, náuseas, vómitos o diarrea. Pero si se sienten bien, es importante que lleguen a la escuela puntualmente todos los días, porque tener que ponerse al día puede resultar estresante e interferir con el aprendizaje.

Los estudiantes de la escuela media pueden tener muchas razones para no querer ir a la escuela: hostigamiento, tareas complicadas, bajas calificaciones, problemas sociales o problemas con los compañeros de clase o los maestros. Hable con su hijo (y después con un consejero o un administrador de la escuela) para saber qué es lo que está causándole ansiedad.

Los estudiantes también pueden llegar tarde a la escuela debido a los cambios en su reloj corporal. Durante la adolescencia, el ritmo circadiano del cuerpo (un reloj biológico interno) se reajusta y les indica a los adolescentes que se vayan a dormir tarde por la noche y se despierten más tarde por la mañana. Mantener fijos los horarios diarios de sueño puede ayudar a evitar los problemas como el cansancio y las llegadas tarde.

En el caso de los estudiantes con un problema de salud crónico, los educadores trabajarán junto con las familias y es posible que reduzcan la carga de trabajo o las tareas para que los estudiantes no se atrasen. Si su hijo tiene un problema de salud crónico, un plan de educación 504 puede ayudarlo con el aprendizaje en la escuela. Hable con los administradores de la escuela si está interesado en desarrollar un plan 504 para su hijo.

10. Hable sobre la escuela

Mantener la conexión con los adolescentes y preadolescentes a medida que se vuelven más independientes puede resultar un desafío para los padres, pero es más importante que nunca. Si bien las actividades escolares, los nuevos intereses y los círculos sociales más amplios pueden desempeñar un papel más importante en la vida de muchos estudiantes de la escuela media, los padres y los tutores continúan siendo las anclas que les ofrecen amor, orientación, apoyo y contención.

Hable con su hijo todos los días para que sepa que lo que ocurre en la escuela es importante. Cuando los adolescentes y preadolescentes saben que sus padres están interesados en su vida académica, también se toman la escuela seriamente.

La forma en que habla con su hijo y lo escucha puede afectar el modo en que su hijo lo escucha y le responde. Escúchelo con atención, mírelo a los ojos y evite hacer otras cosas mientras habla. Asegúrese de hacer preguntas que exijan más que un simple "sí" o "no" como respuesta.

Cuando los adolescentes y preadolescentes saben que pueden hablar abiertamente con sus padres, los desafíos de la escuela media pueden ser un poco más fáciles de enfrentar.

Revisor médico: Larissa Hirsch, MD
Fecha de revisión: agosto de 2023