Contagio
El impétigo es contagioso. Puede contagiar a cualquier persona que entre en contacto con piel u otros elementos infectados (como prendas de vestir, toallas y sábanas) que hayan estado en contacto con piel infectada. Y como el impétigo puede causar picazón, es posible que los niños provoquen la extensión de la infección al rascarse y después tocar otras partes de su cuerpo.
Tratamiento
Cuando afecta solo una pequeña zona de la piel (y especialmente si se trata de la forma no ampollosa), el impétigo se suele tratar con un ungüento antibiótico. Pero si la infección se ha extendido a otras zonas del cuerpo o si el ungüento no está surtiendo efecto, es posible que el médico recete un antibiótico en forma de líquido o píldora, que se debe tomar entre 7 y 10 días.
Una vez que haya comenzado el tratamiento antibiótico, la curación debería comenzar en unos cuantos días. Es importante asegurarse de que su hijo tome los medicamentos tal como se los hayan recetado. De lo contrario, podría desarrollarse una infección cutánea más profunda y más grave.
Mientras la infección se esté curando, lave las zonas de piel infectada con gasa limpia y jabón antiséptico todos los días. Embeba todas las zonas de piel con costras con agua jabonosa tibia para ayudar a quitar las capas de costra (no es necesario quitarla por completo).
Para impedir que el impétigo de su hijo se extienda a otras partes del cuerpo, es posible que el médico o el enfermero le recomienden cubrir las zonas infectadas de la piel con gasa y cinta o con un apósito plástico holgado. Mantenga las uñas del niño cortas y limpias para evitar que se provoque rasguños que podrían provocar infecciones.
Prevención
Mantener la piel limpia puede ayudar a prevenir el impétigo. Los niños deben lavarse las manos bien y con frecuencia, y tomar baños o duchas de forma regular. Preste especial atención a las lesiones de la piel (cortes, rasguños, picaduras de insectos, etc.), a las zonas con eczema y a los sarpullidos, como el provocado por la hiedra venenosa. Mantenga estas zonas limpias y cubiertas.
Cualquier persona de su familia que tenga impétigo debe mantener las uñas cortas y las ampollas del impétigo cubiertas con gasa y cinta.
Prevenga el contagio de la infección por impétigo a otros integrantes de la familia asegurándose de que todos usen sus propias prendas de vestir, sábanas, rasuradoras, jabones y toallas. Si es necesario, reemplace las toallas de tela por toallas de papel hasta que se haya curado el impétigo. Separe las sábanas, las toallas y las prendas de vestir de la persona infectada de las del resto de la familia y lávelas con agua caliente. Mantenga limpias las superficies de su cocina y su hogar.
Cuándo llamar al médico
Llame al médico si su hijo tiene signos de impétigo, en especial si ha estado expuesto a otro integrante de la familia o a un compañero de clase que tiene la infección. Si su hijo ya está recibiendo tratamiento para el impétigo, observe las ampollas y llame al médico si la piel no comienza a curarse después de 3 días de tratamiento o si el niño comienza a tener fiebre. Si la zona que rodea al sarpullido se enrojece, tiene temperatura o comienza a doler al tocarla, informe al médico en cuanto sea posible.
Fecha de revisión: junio de 2014